Siempre he creído que los museos deben ser una parte activa y fundamental en el proceso formativo de la cultura. No deberán ser sólo una acumulación de objetos que dejen dudas en el visitante. Hace falta en el país un Museo de las Identidades, y en tal sentido, y así se lo manifesté una vez al Dr. Leonel Fernández Reyna en su más reciente mandato, el Museo del Hombre Dominicano debería ser transformado pero sin cercenar sus actuales exhibiciones, de modo tal que pudiera verse con claridad el trayecto de la personalidad de un país cuyas principales formas culturales están envueltas en las crisis que lo han afectado, creado y modificado, desde las identidades más tempranas, hasta aquellas que conformaron la identidad cultural, y más tardíamente la nacional.Existen, a mi juicio, puntos claves para reproducir y entender visualmente el proceso al que me refiero. En nuestra historia hay modelos que comprenden cambios radicales. Lo prehistórico y los puntos clave de la desaparición de la…