La ministra de Educación, Josefina Pimentel, planteó ayer que la educación dominicana requiere de una transformación y de un cambio profundo en lo que se refiere al magisterio y su formación, para que los niños, adolescentes y jóvenes dominicanos puedan encontrar en las escuelas la oportunidad de aprender y desarrollarse plenamente y ser mejores personas y ciudadanos.Al encabezar la investidura de 1,793 nuevos maestros del Instituto Superior de Formación Docente Salomé Ureña (Isfodosu), la funcionaria dijo que los bajos rendimientos que presentan los estudiantes dominicanos en estudios de organismos internacionales, deben constituir un estímulo y un gran reto para que “emprendamos juntos una jornada sin desmayo por alcanzar la transformación de la educación dominicana”.Dijo que en procura de enaltecer y dignificar las condiciones de trabajo y magisterial a 4,458 maestros que laboran en una sola tanda, se les completará una segunda tanda, a fin de que mejoren sus ingresos, medida que…