Casi siempre, la forma en que la Policía Nacional ha combatido la delincuencia ha recibido críticas de organizaciones de la Sociedad Civil, de un modo especial de los organismos defensores de los derechos humanos. Alegan los principales voceros de tales organismos, que muchas de las muertes de delincuentes en intercambios de disparos con agentes de la Policía Nacional no son otra cosa que “ejecuciones extrajudiciales”.Es perfectamente comprensible que delincuentes que han hecho de los atracos y asesinatos un hábito, hayan perdido el miedo a la muerte y enfrenten a las patrullas policiales que los persiguen aun cuando sus probabilidades de supervivencia en tales situaciones sean mínimas.Tampoco se puede negar que en algunos casos, patrullas policiales, pretendan encubrir actuaciones injustifi cables bajo el alegato de un supuesto intercambio de disparos.Considero propicia la ocasión para exponer algunas refl exiones en torno a las complejas funciones que la sociedad ha puesto bajo la…