Nueva York.- En las guerras “Contra las drogas” y el “comunismo”, los estadounidenses venden armas y ganan dinero, los latinoamericanos ponen su sangre, pierden la vida. En su reciente visita a México y Centroamérica el presidente Barack Obama pidió cambiar el “foco” de la conversación, no la situación. Más de 200 mil mexicanos, centroamericanos y caribeños murieron en los últimos seis años de “Guerra contra las drogas”, Obama no cambiará eso. Recordó que en las calles estadounidenses mueren jóvenes cada día por las mismas razones.Obama no detendrá el negocio de la industria armamentista en Estados Unidos, menos en Latinoamérica, donde tienen un monopolio vendiéndole a las Fuerzas Armadas y bandas de narcotraficantes.Obama conectó pobreza, delincuencia y migración, llamando a gobiernos y sectores económicos latinoamericanos, a mejorar las condiciones de vida de sus pueblos. Pidió traducir el crecimiento económico en oportunidades de avance económico y social legal para la población…