En la Iglesia universal se celebra el 8 de agosto la fiesta de san Juan María Vianney, un cura, un párroco de Francia, de mediados del siglo XIX, que ha pasado a la historia como modelo de los párrocos. En la República Dominicana, la figura del párroco es conocida desde los inicios de esta isla y desde los inicios de la evangelización. Los psárrocos, en toda la isla, han hecho mucho bien. Por eso recordarlos a ellos en el día 8 de agosto nos invita a nosotros a recordar a esa figura. Ciertamente habrá párrocos que no dieron el ejemplo de san Juan María Vianney, pero cuántos miles de párrocos han hecho tanto bien a tantas personas en toda la geografía nacional. Cuando muchos no se perdían en los caminos, ni en las veredas, ni en los lugares a donde no iba nadie, allí iba modestamente el párroco y no siempre lo que él hacía salía en las primeras planas, ni en los periódicos, ni en las reseñas de la radio, ni tampoco en las reseñas de la televisión. Felicidades a esos buenos párrocos, …
