El país viene abogando desde hace meses por un entendimiento entre el Presidente del partido Revolucionario Dominicano, Miguel Vargas Maldonado, y el expresidente de la República y alto dirigente de ese partido, el Ing. Hipólito Mejía.A pesar de las poses, las medias respuestas, todo el mundo veía no sin gran preocupación que entre esos dos dirigentes las diferencias eran, sino insalvables, harto difíciles de encontrar fórmulas de avenencia que producieran la anhelada unificacion de un partido esencial para la democracia dominicana.Dado el primer paso con un almuerzo en la casa de un exgeneral ahora dedicado a la política, se puede prever una salida definitiva a un conflicto que tiene mucha tela por donde cortar, y un grupo suficientemente poderoso a lo interno que no quiere que se resuelva y se haga convención para cambiar el liderazgo y escoger candidato. Ya comenzaron con que Leonel le dijo a Miguel, que Hipólito dijo esto y aquello, que no a los acuerdos de aposento, que dos no …