Conocí una familia de buena posición, buena formación, que gozaba de prestigio en el pueblo; uno de los bisnietos -en esa familia- cometió un gravísimo crimen, corrupción, y fue llevado a la cárcel; estudiando la historia de esa familia le dije: “El que tenía que haber ido a la cárcel era el bisabuelo”, porque él fue quien fundó esa herencia de esa familia, una herencia podrida, corrupta, y al recibirlo así, sus descendientes recibieron ya una herencia podrida, y como él no pagó en su tiempo en la justicia los actos de corrupción que tuvo, como sus descendientes heredaron todos sus bienes, también heredaron la podredumbre de esa herencia.Es por eso por lo que todos aquellos que fundan una familia sobre una ganancia dañada, podrida, dejan a su descendencia una herencia podrida, que se puede decir una maldición.Las generaciones futuras tendrán que corregir y reparar los daños que hicieron sus antepasados, para que la familia se pueda rehacer.Gracias a Dios, siempre surgen en las fami…