November 10, 2024
Filosofadas
¡Se fue la luz! Disyuntiva: Maldecir mientras vemos con impotencia que se trata de un problema que, por más que se promete, no tiene solución; rabiar porque no podremos encender el aire acondicionado ni ver el programa favorito de televisión, con el peligro de que se nos endurezca la arteria coronaria, o buscar con serenidad y resignación la vela y encenderla hasta que vuelva. Cuando regrese, lanzar un grito de alegría o un ‘viva Trujillo’, usted elije.El Gobierno coloca mil millones de dólares en bonos soberanos. Disyuntiva: Maldecir, rabiar y echar rayos a los que provocaron el déficit fiscal monstruoso que ha obligado a ésta y próximas emisiones y que, por más que se presenten pruebas de las barbaridades cometidas, seguirán como grandes figuras que inciden en la sociopolítica nacional; rabiar y echar rayos porque esta nueva emisión representa un incremento a nuestra ya abultada deuda externa, o, por otro lado, alegrarnos porque los intereses a pagar no alcanzarán el seis por cien...

¡Se fue la luz! Disyuntiva: Maldecir mientras vemos con impotencia que se trata de un problema que, por más que se promete, no tiene solución; rabiar porque no podremos encender el aire acondicionado ni ver el programa favorito de televisión, con el peligro de que se nos endurezca la arteria coronaria, o buscar con serenidad y resignación la vela y encenderla hasta que vuelva. Cuando regrese, lanzar un grito de alegría o un ‘viva Trujillo’, usted elije.El Gobierno coloca mil millones de dólares en bonos soberanos. Disyuntiva: Maldecir, rabiar y echar rayos a los que provocaron el déficit fiscal monstruoso que ha obligado a ésta y próximas emisiones y que, por más que se presenten pruebas de las barbaridades cometidas, seguirán como grandes figuras que inciden en la sociopolítica nacional; rabiar y echar rayos porque esta nueva emisión representa un incremento a nuestra ya abultada deuda externa, o, por otro lado, alegrarnos porque los intereses a pagar no alcanzarán el seis por cien…