En la actualidad, al “sistema de relaciones diplomáticas” se le confiere un lugar preponderante en la evolución de la sociedad internacional, sustentándose este reconocimiento en su milenaria y fructífera historia, así como en su evidente universalidad. Las relaciones diplomáticas son en esencia un necesario vínculo de amistad “con fines pacifistas”, que efectivamente facilita las negociaciones en sus diversos ámbitos y los intercambios (en los distintos órdenes), así como el fomento y desarrollo de la cooperación. Igualmente las relaciones diplomáticas resultan ser fundamentales para la obtención del correspondiente apoyo en aquellas ocasiones en que los Estados necesitan el respaldo internacional por diversos motivos. La exigencia de profesionalización de los correspondientes servicios exteriores, creados por los Estados en función del desarrollo de sus relaciones diplomáticas, se fundamenta esencialmente en las indelegables responsabilidades que deben asumir éstos en lo concernie…