Las personas son víctimas de engaño todos los días, no solo en pueblos remotos o en lugares al otro lado del mundo, sino aquí mismo, en nuestras vidas. Brotan desde su fuente oculta, nos hacen creer en oportunidades y desaparecen como estrellas fugaces de la vida cotidiana, solo que a veces no lo notamos durante el día porque estamos deslumbrados por la luz del sol, y en la noche únicamente son visibles si volteamos hacia el lugar correcto, en un cielo oscuro, pero despejado. Hay mensajes que moldean tu destino de una manera que quizá nunca imaginaste. Las coincidencias y pequeños detalles que ocurren en la cotidianidad son pistas que el destino te reserva de planes mucho más grandes de lo que soñaste; por tal motivo, mi pasado está lleno de notables coincidencias que me convirtieron en quien soy ahora.Identificar los engaños es prepararnos para el porvenir, tomando conciencia del por qué de esas coincidencias. Al mismo tiempo, si las descubres en el momento en el que suceden, estar…
