Los amigos y amigas de Karamis Guadalupe Rodríguez Ovalles, la joven de 14 años asesinada por su novio, se quedaron con los atuendos listos para la gran celebración que harían para festejar con ella la llegada de sus quince primaveras; pero sus trotes de adolescente se cortaron en el camino víctima de la violencia machista. La fiesta sería una sorpresa, en la residencia de unas de sus compañeras de clases pero su novio José Rafael Colón, de 17 años, en pocos segundos cambió el rumbo, y en vez de abrazos, pitos y manjar, Karamis recibió, el sábado por la noche, una puñalada en su costado izquierdo que le perforó el pulmón y le arrancó la vida casi de inmediato, y este domingo su ataúd estaba en silencio ataviado solo con lágrimas, flores y rezos de despedida.En la salita de su humilde residencia, ubicada en la calle Passicá del Barrio Roque, a su madre, la profesora Elsa Ovalles, se le agotaba el llanto, pero su dolor era mayor porque le agobiaba la impotencia, pues la burocracia en …