La Asociación Dominicana de Profesores (ADP), filial de Jarabacoa, llevó a cabo una protesta este miércoles en las afueras de la escuela José Antonio Guzmán Fabián, en el municipio de Jarabacoa, provincia La Vega. La manifestación contó con la participación de docentes y directores de varios centros educativos de la región, quienes alzaron su voz para exigir el inicio de las labores de reconstrucción de la mencionada institución escolar, una promesa que, según afirman, ha sido ignorada por las autoridades.
Durante la concentración, los manifestantes denunciaron la falta de acción del Ministerio de Educación ante esta problemática que consideran urgente y que afecta directamente el desarrollo académico de los estudiantes. Los profesores destacaron que el deterioro de la escuela no solo compromete la calidad del aprendizaje, sino que también representa un riesgo para la seguridad de los estudiantes, profesores y el personal administrativo que diariamente convive en sus instalaciones.
Los manifestantes hicieron un llamado al ministro de Educación, Ángel Hernández, para que cumpla con la promesa realizada durante su última visita al municipio de Jarabacoa, donde se comprometió a llevar a cabo la tan esperada reconstrucción de la escuela. Sin embargo, hasta la fecha, no se han visto avances significativos.
Los maestros, respaldados por la comunidad, padres y residentes de la zona, realizaron un llamado enérgico al ministro Hernández, exigiendo que se atienda de inmediato esta situación. Señalaron que el compromiso asumido no solo debe traducirse en palabras, sino en acciones concretas que garanticen que los estudiantes de Jarabacoa puedan recibir clases en un entorno digno y seguro.
A lo largo de la protesta, se escucharon consignas y mensajes que reflejaban la frustración de una comunidad educativa que, tras años de espera, siente que sus reclamos no han sido escuchados. Además, los residentes del municipio recalcaron que la falta de un ambiente escolar adecuado afecta gravemente la educación de los niños, y que no es justo que los estudiantes deban adaptarse a instalaciones en ruinas.
Los organizadores de la protesta también resaltaron la importancia de que las autoridades se comprometan de manera definitiva con el futuro de la juventud de Jarabacoa, a través de la inversión en infraestructura educativa de calidad.
La comunidad sigue en espera de una respuesta formal por parte del Ministerio de Educación, y confía en que las autoridades darán un paso adelante para resolver esta situación. Mientras tanto, el malestar crece entre los padres, profesores y estudiantes que, con cada día que pasa, ven más lejana la posibilidad de un espacio escolar adecuado.
El llamado de la ADP y de los habitantes de Jarabacoa es claro: la educación no puede esperar, y la reconstrucción de la escuela José Antonio Guzmán Fabián debe ser una prioridad para las autoridades.
