Santo Domingo. En el primer mes de la incidencia del COVID-19, República Dominicana se situó en la cuarta posición de 16 países de América Latina y el Caribe con la mayor cantidad de personas contagiadas por el coronavirus por cada 100,000 habitantes, según un estudio del Observatorio Político Dominicano (OPD).
La entidad, adscrita a la Fundación Global Democracia y Desarrollo (FUNGLODE), indica que República Dominicana cuenta con una tasa de 12.81 personas contagiadas por cada 100,000 habitantes frente a naciones como México, Colombia y Argentina que a pesar de cuadruplicar la población total de este país, presentan tasas de contagio por cada 100,000 habitantes inferiores, lo que significa entonces que la velocidad del contagio en esos tres países ha sido menor que la del país caribeño.
El estudio, autoría de la Unidad de Políticas Públicas del OPD-FUNGLODE, agrega que el país es también uno de los que más decesos tiene situándose en la tercera posición de las naciones analizadas de la región, con una tasa de 0.57 muertes por cada 100,000 habitantes, un mayor número de afectados en relación con países que le superan en cuanto a número poblacional.
La investigación añade que en República Dominicana la letalidad en el primer mes de la pandemia fue de 4.4%, ocupando el cuarto lugar en la región, y aclara que en países donde se tienen grandes cantidades de casos positivos de COVID-19 no necesariamente se presenta la mayor tasa de letalidad por la enfermedad; tal es el caso de Chile, segundo país de la región con mayor cantidad de contagios, pero también es el segundo país con la menor tasa de letalidad general en América Latina y el Caribe.
Desafíos
El informe del OPD-FUNGLODE destaca que en el primer mes de la pandemia en República Dominicana se habían reportado 1,380 casos confirmados, siendo el 55% de los casos hombres, en edad de 63 años en adelante, siendo una de las debilidades que presenta el país para contrarrestar la propagación del COVID-19 no disponer de pruebas suficientes, lo que lleva a que personas que están infectadas con el virus desconozcan su realidad y para cuando se den cuenta ya habrán contagiado a otras personas.
La investigación revela que el país solo cuenta con 600 camas y 400 respiradores en clínicas y hospitales, y un presupuesto general para el Sector Salud de $RD1,290,285,503.47 para hacer frente a la enfermedad, alcanzando solo un 2.5% del Producto Interno Bruto (PIB), cuando la Estrategia Nacional de Desarrollo (END) establece que el gasto público en este renglón para 2020 debió ser de un 4%; colocando al país en el décimo lugar en la lista del gasto en salud de América Latina y El Caribe.
El primer tipo de prueba aplicada en República Dominicana fue la PCR, por lo cual resultaba más difícil tener un control de la cantidad de contagios que en realidad se producían; además de que en un principio, para hacerse las pruebas, las personas debían pagar un monto aproximado de RD$4,300 en los laboratorios privados autorizados, de acuerdo con el análisis “Resultados del primer mes de batalla: sistema de salud dominicano frente al COVID-19”.
Recomendaciones del OPD-FUNGLODE
Ante la propagación del virus en el país, el estudio hace una serie de propuestas a las autoridades dominicanas para que se refuercen las acciones y así garantizar la debida atención a los pacientes de una pandemia cuya curva de contagio aún no llega al pico más alto.
Entre estas recomendaciones se encuentran la necesidad de incrementar la disponibilidad de camas y ventiladores, porque de no hacerlo, entonces la situación pudiera salirse de control y las pérdidas de vidas humanas sería cuantiosa, ya que la capacidad instalada que tiene el Sistema de Salud Dominicano no es suficiente para dar respuesta oportuna a la crisis sanitaria que enfrenta el país ante la pandemia del coronavirus.
“Para incrementar la cantidad de camas y ventiladores se sugiere que las autoridades adecúen instalaciones temporales con las herramientas necesarias para tratar adecuadamente pacientes con el Covid-19, esas instalaciones pueden ser edificaciones públicas, hoteles y clínicas privadas rentadas por el Estado dominicano”, exhorta la investigación del OPD-FUNGLODE.
Otras soluciones que plantea la organización son la necesidad de dotar al personal médico y de enfermería de la protección de bioseguridad adecuada, porque de lo contrario habrá una significativa cifra de este personal contagiado y, por ende, la crisis de salud se agudizará, además de que propone que se gestionen que las pruebas para diagnosticar el COVID-19 sean de mayor acceso a la población, para que se pueda detectar oportunamente las personas que estén positivos al virus, identificar los principales focos de propagación e implementar protocolos que limiten la transmisión y así lograr entonces que la curva de contagio comience a descender.
Para ganar la batallar al coronavirus, los investigadores también exhortan que se endurezcan las medidas de aislamiento social, implementando el toque de queda 24 horas por no menos de una semana y que se forme un ejército integrado por todos los sectores de la nación, de los cuales la población haga un ejercicio responsable, quedándose en sus casas para evitar al 100% el contagio.