En el mismo momento cuando Leonel Fernández bajó las escalinatas del Palacio Nacional empezó la campaña para desacreditar su gestión e inhabilitarlo políticamente.A sus tradicionales adversarios políticos y a los resentidos de siempre se han sumado abiertamente ciertos grupúsculos de la sociedad civil, como Participación Ciudadana y otras ONG’s unipersonales, así como algunos empresarios particulares y grupos empresariales gremializados. Todos contando con el apoyo militante de una canalla mediática, devenida difamadora e irrespetuosa hasta el límite de lo tolerable.Movidos por diversas causas, confluyen en un mismo objetivo. Que no pasa sólo por inhabilitar a Fernández como actor protagónico en los próximos procesos electorales, sino que el fin ulterior es desarticular el proyecto político que ha ganado las últimas cinco elecciones y que encabeza el Partido de la Liberación Dominicana.Porque su propósito no es sólo destruir la imagen de Leonel sino desmembrar la unidad monolítica …